Las grandes llamaradas provocarían alteraciones en las señales GPS, Internet, las comunicaciones de radio y redes de energía, alertó la NASA
Imagen del Sol captada por el observatorio SOHO de la NASA.
Una activa mancha solar entró en erupción la noche del martes y provocó una llamarada de gran intensidad (clase X, la más poderosa), la cual arrojó un filamento de material en dirección de la Tierra, informó la NASA. Además, advirtió que la gigantesca nube podría golpear severamente el campo magnético del planeta.
El Observatorio Solar y Heliosférico (SOHO, en sus siglas en inglés) detectó que una eyección de masa coronal que emerge del lugar de la explosión se dirige al sur de la línea Sol-Tierra. Asimismo, precisó que la gran llamarada se produjo el martes a las 22:12 horas (hora peninsular) y su pico más fuerte se dio 8 minutos más tarde, según informó elmundo.es.
La NASA alertó que si las enormes nubes de plasma solar, las cuales alcanzarían 5 millones de kilómetros por hora, llegan a la Tierra, causarían serios daños a las comunicaciones pues provocarían alteraciones en las señales de GPS, las comunicaciones radiales y redes de energía.