Hay pasiones que van más allá de donde la mente puede alcanzar
En coches y electrónica de consumo es habitual que nos encontremos con esos casos. Así que unir ambas pasiones puede desencadenar el fin del mundo.
Click Car no llega tan lejos por el simple hecho de que no vemos que un ratón con forma de coche llegue a ser un elemento de trabajo diario fiable. No negamos el funcionamiento correcto de estos nuevos ratones, pero no son precisamente un alarde de ergonomía. Eso sí, para quienes aman los coches, es una combinación que les puede gustar.
Los ratones Click Car Mouse son réplicas exactas en miniatura de coches famosos y podemos comprarlos con o sin cables. La resolución puede cambiarse entre 800 y 1600 dpi, el receptor en los modelos inalámbrico es nano.
Estos ratones pueden ser una buena idea como regalo de Navidad si sabemos que a quién se lo vamos a hacer es un apasionado del motor. El precio a pagar es de 30 euros para el modelo con cable y 40 euros para el que nos deja liberados.