Vampiresco descubrimiento
Un esqueleto de un supuesto "vampiro" fue descubierto en Gran Bretaña, según publica el diario ingles Daily Mail.
Al parecer el esqueleto apareció con trozos de metal similares a estacas clavados en los hombros, el corazón y los tobillos, la creencia popular en la Edad Media era que estos seres podían 'perseguirte en el más allá', por lo que había que asegurarse de que "no pudieran levantarse".
El descubrimiento de un esqueleto, que data del año 550 A.C. en la catedral de Southwell, Nottinghamshire es algo excepcional, ya que sólo un puñado de estos entierros han sido descubiertos en el Reino Unido. La gente consideraba 'muertos peligrosos' a los vampiros, por eso eran enterrados de forma que no pudieran levantarse de sus tumbas para atormentar a los vivos.
El descubrimiento se detalla en un nuevo informe de Mateo Beresford, de la Universidad de Arqueología de Southwell, aunque inicialmente fue encontrado por el arqueólogo Charles Daniels durante la investigación original en Church Street en 1959.
"A lo largo de este período el castigo de ser enterrado en el anegado suelo, boca abajo, decapitado, estacado o de otra manera se reservaba para los ladrones, asesinos o traidores o posterior para los desviados que no se ajustaban a las normas de las sociedades: los adúlteros, los alteradores de la paz, el interruptor impío o juramento", explica Beresford.
El descubrimiento se produce cinco meses después de que unos arqueólogos encontraron restos de una tercera fosa en el centro de Bulgaria vinculada a la actual. El esqueleto estaba atado a un ataúd con cuatro abrazaderas de hierro. Además piezas ámbar ardiendo fueron colocados en la parte superior de su tumba. Los huesos eran de un hombre de unos treinta años que había sido sometido a un ritual superstición, para evitar que se convierta en un ser maligno después de su muerte.