lunes, 29 de octubre de 2012

Sandy: El Frankenstein de los huracanes


¿El huracán Sandy refuerza la profecía maya del fin del mundo?


Los edificios federales, vacíos. La Bolsa, inoperativa. Las escuelas, abandonadas. No hay transporte público y la mayoría de los vuelos se han cancelado. 

Y lo más preocupante de todo: ¡los McDonald's están cerrados!, bromean en Twitter a partir de una foto de uno de sus restaurantes con el cierre echado. No hay otra explicación válida: es el fin del mundo.

Nueva York se ha convertido en una ciudad fantasma, tal y como muestra esta foto de Calvin Vanderbeek. La llegada del huracán Sandy ya ha evacuado a cerca de 400.000 personas y se prevé que las inundaciones puedan llegar a los tres metros de altura. La gente no tiene miedo, siente pánico. Eso sí, unos más que otros. Porque es imposible no inmutarse ante una catástrofe natural como la que se avecina en Estados Unidos, pero una cosa es afrontar el desastre, y otra muy distinta esperar paralizado el fin de nuestros días.

El huracán Sandy y el Apocalipsis 
La predición maya acerca del final de los tiempos tiene en ascuas a buena parte de la población mundial. Asiáticos, europeos, americanos... La profecía no entiende de nacionalidades, pero sí de una fecha exacta: el 21 de diciembre de 2012. Un fenómeno que tendrá lugar, según sus adeptos, tras una serie de desastres y catástrofes naturales. La de EEUU no es la primera, pero sí podría ser la última, la antesala del Apocalipsis.

El pavor y la incertidumbre acerca del final del mundo se reaviva cada vez que se produce un fenómeno como el que acecha a Nueva York y alrededores. Sucedió este mismo año con el tsunami de Japón, el año pasado con el terromoto de Turquía y el huracán Irene también en la ciudad de los rascacielos.

Pero nada similar a lo que se espera del huracán Sandy, bautizado por los meteorólogos norteamericanos como 'la tormenta del fin del mundo' o 'Frankenstorm' por su coincidencia con Halloween. Y por si el terror no tuviese ya pocos fundamentos para atemorizar a la población, el conocido meteorólogo Stu Ostro se ha apuntado a la teoría del Apocalipsis con trágicos pronósticos sobre lo que supondrá el huracán Sandy difundido en un informe que ya ha dado la vuelta al mundo.