jueves, 3 de noviembre de 2011

Steve Jobs y su cruzada contra Android

El sistema operativo móvil impulsado por Google fue la gran obsesión de Steve Jobs sus últimos años de vida


Su objetivo era el de destruirlo según revelan algunos detalles filtrados de la biografía del genio de Apple.

Que Steve Jobs no era un entusiasta de Android estaba claro tras las numerosas demandas de infracción de patentes presentadas contra fabricantes socios de Google en los últimos meses, convertida en una auténtica guerra contra compañías como Samsung que está alcanzando incluso a sus relaciones comerciales.

El sistema operativo de Google fue subestimado en un principio en Apple, visto como una ‘mera molestia’ cuando entró en escena a finales de 2008. Las relaciones de Apple y Google eran entonces privilegiadas y excelentes, aliados de facto contra un enemigo común: Microsoft.

Sólo unos meses más tarde, y tras comprobar que Google comenzaba a entrar en terrenos de Apple y que Android iba a suponer una gran competencia, Steve Jobs dio los primeros pasos contra su aliado. Al principio con menudencias como la negativa de Apple a la aplicación Google Voice para ser integrada en iTunes App Store y pronto con una decisión que avanzaba la guerra actual, expulsando a Eric Schmidt (CEO de Google en esos momentos) del consejo de administración de Apple.

Una estrategia comprensible para ‘no tener al enemigo en tu propia casa’ aunque lo que no sabíamos en esos momentos es que Android era una verdadera obsesión para Jobs. Algunos pasajes de su biografía indican hasta qué punto: “Si es necesario, voy a utilizar mi último suspiro y voy a gastar cada centavo de los 40.000 millones de dólares que Apple tiene en el banco para corregir este mal. Voy a destruir a Android, porque es un producto robado. Estoy dispuesto a ir a una guerra termonuclear por esto“.

En una reunión posterior con su ex-amigo Eric Schmidt para intentar suavizar la situación se mostró inflexible: “No quiero tu dinero. Si me ofreces 5 mil millones no los quiero. Tengo un montón de dinero. Quiero que dejes de usar nuestras ideas en Android, eso es todo lo que quiero”, le dijo un super molesto Jobs consciente, ya que Android no era una mera molestia y que el dominio de su niño iPhone estaba en peligro.

La historia posterior es más conocida, y esperable. Aunque los de Cupertino siguen vendiendo iPhones a buen ritmo, Google ha fulminado a Apple en el mercado del móvil inteligente en menos de tres años y la cuota de mercado mundial de androides cercana al 50 por ciento duplica a la de iPhones. Steve Jobs se llevó esta obsesión al más allá.